5G

¿Qué es el 5G?

La tecnología 5G es, sin duda, uno de los grandes avances que viviremos en los próximos años. 5G no es solo la evolución natural y lógica del 4G, es una revolución tecnológica que habilitará al IoT masivo, a el coche conectado o a la sanidad en línea, incrementado de manera excepcional la velocidad de descarga de todos los dispositivos y permitiendo que la era móvil entre en una nueva dimensión.

¿Es realmente una tecnología tan innovadora?

Las cifras que se manejan con respecto a parámetros tecnológicos y que promete el 5G son ciertamente abrumadoras. Se presenta como una red potente y flexible que permitirá la conexión de miles de millones de objetos a Internet, permitiendo que todos los sectores se beneficien de un aumento espectacular en la transferencia de datos y de una muy baja latencia, con funciones adicionales como la posibilidad de dar prioridad a dispositivos que deban estar permanentemente conectados por motivos de seguridad.

¿Cuándo empezará a desarrollarse en Europa?

La estrategia de la Unión Europea para el desarrollo del 5G se basa en el despliegue temprano de la tecnología 5G. En particular, se pretende que antes de finales del 2020 haya en cada país miembro al menos una red comercial 5G.

Para ello, se han identificado diferentes bandas de frecuencias como las más idóneas para el despliegue como la banda de 3,4 a 3,8 GHz, la banda de 700 MHz y la banda de 26 GHz.

En España, ya se realizó en 2018 la subasta de la banda 3,6 a 3,8 MHz y se están dando autorizaciones en dicha banda para poder poner en marcha pilotos, al igual que con la banda de 28 GHz.

En lo que respecta a la banda de 700 MHz, el mandato de la Unión Europa a los gobiernos de cada país ha sido, salvo causa justificada,  tomar las medidas necesarias para que antes del 30 de junio de 2020, esta banda de frecuencias esté disponible para que los operadores de comunicaciones electrónicas  puedan utilizarla para el despliegue de 5G. Si se quiere alcanzar esa fecha y poder realizar el proceso de manera ordenada y segura, es imprescindible, que la Administración Española aborde este asunto de manera urgente. Ya se está avanzando en este sentido, dado que el pasado 8 de marzo el Consejo de Ministros declaró de urgencia la tramitación del proyecto del Real Decreto por el que se aprueba el Plan Técnico Nacional de la Televisión Digital Terrestre y se regulan determinados aspectos para la liberación del segundo dividendo digital.

¿Qué es el Segundo Dividendo Digital?

El despliegue del 5G se puede ver ralentizado si no se liberan las frecuencias que ahora mismo utilizan los canales de la Televisión Digital Terrestre (TDT), que es la que ven diariamente más de 38 millones de españoles.  La TDT utiliza la banda de 700 MHz, que es precisamente una de las que los operadores de telecomunicaciones deberán utilizar para el 5G.  Para impulsar el despliegue del 5G, por lo tanto, es necesario liberar esas frecuencias y moverlas a otra banda cuanto antes, sin que esto suponga ninguna pérdida en la calidad o definición de la señal TDT. A este proceso se le denomina Segundo Dividendo Digital.

¿En qué consiste este proceso?

La implantación del 5G debe tratarse como una cuestión de Estado que, además, es exclusivamente técnica. Por un lado, es necesario acometer un proceso de adaptación de las instalaciones de recepción de los edificios en gran parte de los edificios colectivos de España y, además, los propios radiodifusores, que transmiten la señal de televisión deberán emitir durante unos meses en las frecuencias antiguas y en las nuevas. Se trata, por lo tanto, de un esfuerzo de adaptación que tiene como objetivo final permitir que nuestro país siga siendo uno de los principales actores en el sector de las telecomunicaciones para que el 5G tenga más hueco en el espectro radioeléctrico.

¿Por qué es tan importante este proceso?

Además del posible procedimiento de infracción que la comisión pudiera abrir a España en caso de no haber realizado el proceso ajustándose a los plazos, están en juego varios asuntos de máximo interés. Por un lado, los ciudadanos no deben ver interrumpida la recepción de los canales de televisión pública y privada, algo que podría llegar a suceder si el proceso no comienza cuanto antes para garantizar que se ejecuta de manera segura y ordenada. Por otro lado, es fundamental que los operadores de telecomunicaciones impulsen el despliegue del 5G, de manera que nuestro país no se quede atrás en una tecnología que está llamada a cambiar todos los sectores.

¿Cuál es la postura del COIT?

Desde el Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicación abogamos por un modelo ágil y seguro que posibilite una transición ordenada, de manera que, con antelación suficiente, nuestro país disponga de la tecnología 5G desplegada y los ciudadanos puedan disfrutar tanto de las nuevas velocidades de conexión que posibilita el 5G como de los contenidos proporcionados a través de la TDT.